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“Se cosecha lo que se cultiva”


Monumento a la Tolerancia • Acero • 1985
Chillida-Leku
“Se cosecha lo que se cultiva. Este gobierno cultiva la esperanza de acabar con la violencia, cosecha que será fruto de toda la sociedad española” Són paraules del president Rodríguez Zapatero. Pronunciades el divendres en la roda de premsa posterior al consell de ministres i que expliciten clarament la voluntat de resoldre definitivament el problema del terrorisme d’ETA.
El president Zapatero és un home valent. Sap que els problemes complexes, i el terrorisme ho és, necessiten solucions complexes i multilaterals. Sense afluixar en la lluita policial i judicial, Zapatero sap que a un problema polític li correspon una solució política. En definitiva és el que varen intentar González i Aznar en les negociacions d’Argel i de Suïssa. Com diu el mateix Zapatero: "El proceso será duro, largo y difícil". Però les expectatives de pau són considerables. Ho explica força bé Luís R. Aizpeolea en un interessant article a El País d’avui:
“El presidente del Círculo de Empresarios Vascos, Alechu Echeverria, manifestó esta semana, en un foro público madrileño, su optimismo sobre las expectativas de paz en Euskadi, tan sólo unos horas antes de que Zapatero lo dijera en La Moncloa.El último capítulo de este hervidero político lo ha ofrecido esta misma semana la formalización de relaciones entre el sindicato abertzale LAB y el socialista UGT, un fenómeno inédito en la democracia española. Previamente, están las conversaciones informales entre dirigentes del PSE y la hoy ilegalizada Batasuna; su traducción en los movimientos sociales, el papel mediador que está jugando un sector de la Iglesia vasca próximo al obispo de San Sebastián, monseñor Uriarte, con la presencia en Euskadi del sacerdote irlandés Alec Reid, impulsor del proceso de paz en Irlanda del Norte, y la comunicación informal entre Gobierno y ETA. "Se están produciendo múltiples contactos en la sociedad vasca, y la única manera de que se consolide un proceso de paz es que se haga desde distintos ámbitos y por la base", señalan en medios de los socialistas y nacionalistas vascos, y lo admiten en el Gobierno”.
Una bona anàlisi de la situació la fa també en Lluís Foix a la seva llibreta a La Vanguardia.
Lamenta Foix la utilització partidista del terrorisme per part del PP. Un fet inèdit a Europa: “En los países serios el terrorismo no entra en la agenda de los partidos. No ha ocurrido nunca en Inglaterra. Cuando Bush declaró la guerra al terrorismo internacional después del 11 de septiembre de 2001 todo el país y todo el mundo se puso a su lado. Sólo empezaron a lloverle las críticas, dentro y fuera de Estados Unidos, cuando se empeñó en invadir Iraq sin tener en cuenta el derecho internacional. En Francia ocurre lo mismo. Y en Italia y en cualquier país democrático. En España también había sido siempre así hasta que el Partido Popular se ha empeñado en convertir el terrorismo en una de sus armas políticas. Entiende que sólo su visión es la posible y la válida”.
Zapatero està decidit a liderar, com va fer Blair amb el problema irlandès, el procés de pau a Euskadi. I ho està malgrat les crítiques i la crispació del PP. Ho va dir clarament divendres: “La estrategia del PP no va a perjudicar las expectativas de paz”.
Decidit i valent. Un Zapatero que com diu Enric Juliana en el seu llibre “La España de los pingüinos” creu en el poder taumàturgic de determinades frases: “Se cosecha lo que se cultiva”. Cultivem la pau i collirem la pau. La pau dels valents.